Uno de los metales más utilizados en joyería para crear piezas que sean bonitas, pero también con alto valor, es el oro, pero hay que tener en cuenta que dentro de este existen diferentes tipos según su pureza. Uno de ellos es el oro de primera ley, que, por sus características, debería situarse como nuestra primera opción si queremos adquirir una joya de calidad garantizada.
Qué es exactamente el oro de primera ley
Es muy probable que hayas visto o escuchado muchas veces esa referencia, pero no sepas realmente qué es oro de primera ley. Pues bien, se denomina oro de primera ley al oro de 18 quilates.
Un quilate es la unidad de medida que se emplea para expresar la cantidad de oro puro que contiene una aleación y representaría la veinticuatroava parte de la masa total (1/24).
Esto quiere decir que cuando decimos que una joya está realizada en oro de 18 quilates, estamos indicando que el 75 % de su composición es oro puro, mientras que el 25 % restante está formado por otros metales como el cobre o la plata, habituales en joyería porque aportan a la pieza color y dureza.
Por esto mismo, al acabado en oro de primera ley también se denomina oro 750 (en referencia a las 750 milésimas de oro que posee por cada 1000), un número que se suele grabar en el interior de anillos, pulseras o pendientes, lo que habitualmente conocemos como contraste.
Aunque en un principio el oro puro (de 24 quilates) pueda hacernos pensar que es mejor, tiene algunos inconvenientes, como que se deforma con mayor facilidad, de ahí que el de 18 quilates sea el más apropiado para alta joyería, ya que no pierde su forma y mantiene su alto valor. Por tanto la mayor calidad posible en las joyas de oro, es la del oro de 18 k (quilates).
Me gustaría reseñar, que en España lo más habitual es que las joyas de oro sean de 18 quilates, porque así lo marcaba la ley antiguamente y era el consenso al que se llegó en el gremio de joyeros. Sin embargo, otros países en Europa permitieron la fabricación y venta de joyas de oro de menos quilates, dando así a joyas de 14 quilates o de 9 quilates. Estas joyas tienen menos cantidad de oro puro, por lo que resultan más económicas. Las joyas de oro de 14k o de 9k no son consideradas joyas de oro de primera ley.
Ahora, con la globalización, ya se puede adquirir en España joyas de menos quilates, con otras características como puede ser una mayor dureza, pero con menos contenido en oro. Si compras este tipo de joyas debes saber que si en un futuro quieres vender el oro, su valor será inferior al de 18k, porque contienen menos cantidad de oro puro.
En nuestra joyería en Valencia encontrarás todo tipo de joyas adaptadas a tus gustos y preferencias realizadas en oro de primera ley tanto amarillo como blanco o rosa.
Cómo saber si es oro de primera ley
Ahora que ya conoces qué es el oro de primera ley y su significado, seguro que te interesa saber cómo reconocerlo para saber siempre lo que estás comprando.
Buscar el contraste
Prácticamente, todas las piezas de oro llevan serigrafiada esta información en una parte no visible, así que toca observar con detenimiento hasta dar con ella. Una buena lupa te puede ayudar.
En esta tabla puedes ver algunos de los «sellos» de contraste que te puedes encontrar en las joyas según el material con el que están hechas. Si te fijas, solo el que pone «750» es el sello del oro de primera ley.
Consultar con un tasador oficial
Aunque existen muchos métodos caseros, nada es más fiable que la opinión experta de un profesional.
Adquirir la pieza en un establecimiento de confianza
Donde nos ofrezcan toda la información y certificación necesaria y, además, puedan testar in situ la autenticidad del oro.
Elegir joyas de oro de primera ley es apostar por la pureza, la calidad y por piezas que nos van a durar muchísimo tiempo manteniendo su aspecto y su belleza para poder lucirlas como el primer día.
Y tu, ¿ya has elegido la tuya?
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